Preparando mi piel para los primeros rayos de sol!!!

Buenos días!!! ¿Qué tal el fin de semana?

Después del tiempo tan fabuloso que hemos tenido, es hora de empezar a preparar nuestro cuerpo para los primeros rayos de sol. Por ello, os quiero explicar lo que yo hago por si os sirve de ayuda. Yo prometo que esta semana empiezo con ello!!!

Tenemos que tener claros tres rituales imprescindibles para poder cuidar nuestra piel, antes y durante el verano: Exfoliar, hidratar y proteger. 

1. Exfoliar: Durante el invierno, a pesar de que a nuestra piel no le llegan las radiaciones solares, pueden producir durezas, por la mayor fricción de la ropa; además, de tener más sequedad, por no hidratarnos todo lo que deberíamos. Por ello, debemos de exfoliarnos, para quitarnos todas las pieles muertas e impurezas para que la piel respire y se desintoxique. De esta forma la piel se ve más tersa, menos oleosa y con más luminosidad. Puedes encontrar todo tipo de productos exfoliantes: cremas, polvos, jabones, esponjas, . . . Incluso remedios caseros. ¿Os interesa?

Exfoliante casero: Un vaso de aceite con un poco de azúcar!!! Tras una buena ducha te exfolias todo el cuerpo. Si lo haces una vez al mes, y mejor aún, cada 15 días lo notarás muchísima!!! Porque además de exfoliar nutre!!!

2. Hidratar: Por mucho que nos cueste, es uno de los pasos más importantes, debería ser un ritual a seguir a diario, sin excepción alguna. Una piel deshidratada pierde elasticidad, la notamos más seca y provoca la aparición de arrugas, por eso, hemos de tener la hidratación muy en cuenta para prevenir el envejecimiento, siempre y cuando esté en nuestras manos. 

Hidratarnos, no sólo consiste en la aplicación diaria de crema tanto en cuerpo, como en cara y cuello; sino también, en la cantidad de agua diaria que bebas y en la ingesta de alimentos. Debemos beber alrededor de 2 litros de agua diarios, que junto con la aplicación de una buena crema hidratante (adecuada para tu piel), y tomar cinco raciones diarias de frutas y verduras, si lo cumples, es suficiente para tener una piel bien nutrida. 

3. Proteger: Por último, y no por ello menos importante, tenemos que tener en cuenta la protección solar. Yo reconozco, que en muchas ocasiones, no le doy demasiada importancia, hasta que ves alguna marchita que no tenías y piensas: "si me hubiese puesto protección, o de factor más alto, . . .". Es muy importante aplicarte protección solar, sobre todo en los meses que vas a exponer tu piel al sol, sin descuidar la cara y el cuello durante todo el año. Debes aplicar el factor correspondiente a tu piel, con la piel bien seca, media hora antes de exponerte al sol, con el fin de protegerte de manchas en la piel, fotoenvejecimiento, arrugas, deshidratación . . .

Aunque no hagamos casos a nuestras madres, cuando nos lo dicen, la piel tiene memoria, y si la cuidamos cuando podemos, no tendremos que tratarla cuando ya la tengamos dañada. Más vale el remedio que la enfermedad, no creéis? 

Feliz semana!!!

XO. XO. ;)